No es que se trate de una nueva pose kamasutrica gay, que Justin Woltering viene a revelar. Es que este caramelizado adiestrador erótico personal, interprete actoral y macho de portadas, mostró en la revista DNA # 129 una acalorada transformación, de niño bueno lampiño a macho cabrío velludo, que demuestra definitivamente que “aunque el macho se vista de seda, delicioso se queda”.
